¿Cuál es el IVA en la reforma de una vivienda?

¿Qué IVA se aplica en las reformas de viviendas?

Como ya hemos dicho, la respuesta general a esta pregunta es el 21%. Para que puedas disfrutar de una reducción del IVA en la reforma de tu vivienda, la obra que vas a realizar deberá cumplir una serie de requisitos relacionados con la cuantía de los materiales, el destinatario o beneficiario de las obras y la fecha de finalización de las mismas.

¿Quién puede beneficiarse de un IVA del 10%?

La primera condición para poder disfrutar de un IVA reducido es que dicha reducción se le aplique a una persona física o comunidad de propietarios, no a una empresa ni a un individuo con personalidad jurídica. Solo se puede aplicar la reducción del IVA en reformas de viviendas, no a locales relacionados con una actividad económica.

Por tanto, el destinatario de la factura no debe actuar en la vivienda como empresario o profesional.

Además, si se trata de una comunidad de propietarios, el IVA reducido no será aplicable si la factura va destinada al administrador de la finca o a la entidad aseguradora.

¿Se puede aplicar la reducción del IVA a cualquier inmueble?

La respuesta es no: el uso que se pretende dar a la vivienda que se reforma debe ser un uso particular.

Por consiguiente, hay reducción de IVA en la reforma de una vivienda habitual, pero no hay derecho a la reducción del IVA en la reforma de una vivienda para alquilar, puesto que la finalidad del propietario es alquilarla, no utilizarla él mismo como vivienda.

Es importante no confundir el concepto de vivienda para uso personal con el de vivienda habitual: la reducción del IVA será aplicable siempre que la vivienda a reformar se destine a un uso personal, pero eso no quiere decir que tenga que ser obligatoriamente la vivienda habitual: también podrá aplicarse un IVA reducido a las reformas en la segunda residencia.

¿Se puede aplicar la reducción del IVA a cualquier tipo de obra?

También en este caso, la respuesta es no. Para poder beneficiarte de la reducción del IVA en la reforma de tu vivienda, el coste de los materiales usados en la obra debe ser inferior al 40% del coste total de la reforma.

Por materiales se entiende todo aquello que se utilice para llevar a cabo la construcción y que al término de las obras quede incorporado dentro de su estructura. Quedan, por tanto, excluidos los andamios y en general, todas las herramientas y maquinaria que se necesiten para llevar a cabo la construcción.

También se excluyen del cómputo de materiales los electrodomésticos, tanto los de gama blanca como los de gama marrón.

Por último, para que la obra sea considerada como reforma, se debe acreditar que la construcción de la vivienda concluyó al menos dos años antes de que dieran comienzo los trabajos de reforma.

¿Qué otros aspectos se deben tener en cuenta?

Para que no tengas ningún problema de cara a demostrar tu derecho a la reducción del IVA en la reforma de tu vivienda, además de todo lo anterior deberás asegurarte de que:

• Se desglosen bien los materiales en el presupuesto y en la factura, para que pueda comprobarse fácilmente que el coste de los mismos es inferior al 40% del coste total de la reforma.
• El concepto de la factura refleje el concepto principal que motiva la obra (al que se le va a aplicar el IVA reducido).
• Exista en la factura una enumeración de todas las labores realizadas.
• Declaras de forma expresa las dos condiciones principales: que se trata de una vivienda para tu uso personal y que su construcción finalizó como mínimo dos años antes del inicio de las obras de reforma.

¿Cómo se aplica la reducción de IVA en la reforma de una vivienda?

A modo de resumen, el esquema de aplicación del IVA reducido es:

• Sólo venta de materiales: IVA al 21%
• Sólo mano de obra: IVA al 10%.
• Mano de obra + materiales, con coste de materiales inferior al 40% del valor total de la reforma: IVA al 10%.
• Mano de obra + materiales, con coste de materiales superior al 40% del valor total de la reforma): IVA al 21%.

Casos especiales

En ciertos casos, la finalidad de la reforma o el motivo por el que se realiza pueden justificar la aplicación de un IVA reducido:

• Tratamiento y refuerzo de elementos estructurales, incluyendo cubiertas y fachadas.
• Refuerzo de la seguridad estructural de la edificación.
• Refuerzos en cimentaciones, incluyendo el tratamiento de forjados y pilares.
• Reconstrucción de patios de luces y fachadas interiores.
• Instalación de ascensores, así como los elevadores para personas con discapacidad.

¿Hay reducción de IVA en las reformas menores?

Algunas reformas de menor calado también pueden beneficiarse de una reducción en el IVA:

• Carpintería, albañilería y fontanería.
• Cerramientos y climatización.
• Instalaciones eléctricas, agua y sistemas de protección contra incendios.
• Mejora de la eficiencia energética.
• Mejora del rendimiento de las instalaciones térmicas.
• Instalación de equipos alimentados con energías renovables.

Conclusión

El IVA en las reformas de vivienda tiene una estructura compleja, determinada tanto por el tipo de trabajo realizado como por el destino final de la vivienda. En muchos casos, la diferencia entre un IVA estándar del 21% y uno reducido del 10% puede traducirse en un ahorro considerable. La clave está en saber cuándo y cómo se aplican estas tarifas.

Por ejemplo, aunque ambas, la vivienda para uso personal y la vivienda habitual, pueden beneficiarse del IVA reducido, es crucial distinguir entre ellas para cumplir correctamente con la normativa. Además, factores como la proporción de material en el coste total y la antigüedad de la vivienda pueden influir directamente en el IVA aplicable.

Desde Todopisos recomendamos que, al planificar una reforma, no solo debes considerar diseño y funcionalidad, sino también estos aspectos fiscales que, en última instancia, afectarán el presupuesto total de tu proyecto.